martes, 19 de febrero de 2013

Fotografiar fauna protegida en Andalucía

http://www.lynxexsitu.es/ficheros/galerias_fotos/16/linces19.jpg

Es frecuente ver en internet gran cantidad de fotos y videos de especies protegidas como el lince ibérico o el águila imperial (incluso de nidos). 
La fotografía y grabación de animales, en principio una actividad inocua (aunque no siempre), está regulada por la ley en Andalucía.

A continuación tienes un resumen de la normativa aplicable:


Decreto 23/2012, de 14 de febrero, por el que se regula la conservación y el uso sostenible de la flora y la fauna silvestres y sus hábitats



La fotografía, filmación, grabación y seguimiento de especies silvestres requiere autorización cuando afecte a especies amenazadas (incluidas en el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas) de aves y mamíferos en época de reproducción o para cualquier especie de fauna silvestre si se usan puestos fijos durante más de una jornada; en los demás casos no se requerirá autorización, siempre que no se moleste o inquiete a los animales. (Atención en este punto sobre el empleo de determinadas técnicas como el uso de hides y cámaras de fototrampeo).

[El celo del lince ibérico suele producirse en pleno invierno, en general durante el mes de enero, aunque puede suceder durante todo el año (Rodríguez de la Fuente, 1970; Blanco, 1998; Pereira y Rodríguez, 2003)].
 
Las solicitudes de autorización serán formuladas y tramitadas conforme a lo dispuesto en los artículos 12 a 15 del Decreto 23/2012.

Las autorizaciones serán motivadas y contendrán las condiciones, limitaciones o controles que se consideren necesarios. La actuación a solicitar deberá estar motivada, justificando la necesidad de la actuación, demostrando siempre la inexistencia de otra solución satisfactoria.

Cuando estas actividades se pretendan desarrollar en espacios naturales protegidos, deberá además observarse la normativa específica aplicable a dichos espacios, así como los instrumentos de planeamiento que ordenen la utilización de sus recursos naturales.

Si se requiriese una autorización excepcional, se deberá realizar una solicitud conforme los trámites siguientes, dependiendo del caso:
  • Autorización excepcional. Anexo III. Código 03. Molestia intencionada de fauna silvestre. 
  • Autorización excepcional. Anexo IV. Código IV. Otras autorizaciones no contenidas en los supuestos anteriores.
En caso de tratarse de actividades cinematográficas y fotográficas desarrolladas por empresas o con motivo del ejercicio profesional en Parques Naturales, se ha solicitar una autorización para la realización de otras actividades en Parques Naturales.

 

Ley 8/2003, de 28 de octubre, de la flora y la fauna silvestres


Está totalmente prohibido dar muerte, capturar en vivo, dañar, perseguir, molestar o inquietar intencionadamente a los animales silvestres sea cual fuere el método empleado, en particular durante el período de reproducción, crianza, hibernación y migración, recolectar sus larvas o crías, alterar o destruir sus hábitat, así como sus lugares de reproducción y descanso. 
Esta prohibición podrá quedar sin efecto previa autorización de la Consejería competente en materia de Medio Ambiente cuando sea necesario por razones justificadas de investigación, educación, repoblación o reintroducción.

Las actividades de ocio, deporte y turismo activo, así como las de carácter tradicional que se desenvuelvan en el medio natural, deberán respetar sus valores medioambientales, especialmente las especies silvestres y sus hábitats, así como las condiciones del paisaje.


Infracciones y sanciones: Título IV de la Ley 8/2003

INFRACCIONES: Artículos 73, 74 y 75. Se considerarán infracciones:

1. LEVES: El incumplimiento de las prohibiciones establecidas cuando se trate de ejemplares de especies silvestres no amenazadas, sin autorización

2. GRAVES: El incumplimiento de las prohibiciones establecidas ecuando se trate de ejemplares de especies silvestres amenazadas, catalogadas como vulnerables o de interés especial, sin autorización. 

3. MUY GRAVES: El incumplimiento de las prohibiciones establecidas cuando se trate de ejemplares de especies silvestres amenazadas catalogadas como extintas en estado silvestre, en peligro de extinción o sensibles a la alteración de su hábitat, sin autorización.

SANCIONES: Artículo 82:
- Infracciones leves: de 60,10 a 601,01 €
- Infracciones graves: de 601,02 a 60.101,21 €
- Infracciones muy graves: de 60.101,22 a 300.506,05 €
 

NORMATIVA APLICABLE:

A nivel andaluz:

  • Ley 8/2003, de 28 de octubre, de la flora y la fauna silvestres

  • Decreto 23/2012, de 14 de febrero, por el que se regula la conservación y el uso sostenible de la flora y la fauna silvestres y sus hábitats.

A nivel nacional:

  • Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero, para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas.

  • Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad

 

sábado, 9 de febrero de 2013

Doñana no se toca

Doñana es posiblemente el espacio natural protegido más importante de España e incluso de toda Europa, tiene dos figuras de protección otorgadas por la Ley, es Parque Nacional y Parque Natural. Además cuenta con otras figuras de reconocimiento y protección internacional:
  • Reserva de la Biosfera (Programa MaB - UNESCO)
  • Humedal de importancia internacional por el Convenio de Ramsar
  • Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA)
  • Lugar de Importancia Comunitaria (LIC)
  • Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO

"Flamencos en Doñana". Premio Fauna 2007. Consejería de Medio Ambiente, Junta de Andalucía. Autor: Jorge Sierra


Esta foto, una de mis favoritas, ya nos da una idea de la importancia de conservar este lugar, donde viven muchas especies animales y vegetales, entre ellas el lince ibérico y los espectaculares flamencos.

Pero Doñana, a lo largo de la historia ha sufrido duros golpes que han puesto en peligro su conservación. El más conocido es sin duda el accidente minero de Aznalcóllar, ocurrido en abril de 1998, cuando una balsa de residuos mineros de metales pesados y  de una elevada acidez, perteneciente a la empresa Boliden-Apirsa, se fracturó y liberó a la cuenca del río Guadiamar, el último gran afluente del Guadalquivir, 6 hm3 de lodos piríticos y aguas ácidas con una elevada concentración de metales en disolución.

Vista aérea del desastre. Fuente: elmundo.es

Las consecuencias ecológicas fueron muy graves puesto que se contaminaron las aguas, los suelos y los cultivos, y afectó a la flora y fauna silvestre de la zona. Fue necesario una intervención de urgencia por parte de la administración pública para detener el avance del vertido, así como de limpieza y descontaminación de la zona afectada. Todo ello supuso una gran inversión económica estimada en cerca de 90 millones de euros.
90 millones de euros, de los cuales la empresa responsable del desastre quedó absuelta de pagar.

Tras la restauración de la zona contaminada, se declaró el Corredor Verde del Guadiamar como Paisaje Protegido, constituyendo de esta manera un paso natural para las especies, que conecta Sierra Morena con Doñana.

Al siguiente año, en 1999, se produjo un vertido de fuel de un petrolero junto a la refinería La Rábida de Cepsa, que terminó afectando a la playa de Matalascañas y a la costa del Paque de Doñana.

En octubre de 2012, WWF denunciaba vertidos de aguas residuales sin depurar procedentes de 3 municipios, lo que supone 5 millones de litros diarios, lo equivalente a 2 piscinas olímpicas.
Mapa de los vertidos. Fuente: WWF (Pica sobre el mapa para ampliar)

Y ahora nos encontramos con un nuevo proyecto de Gas Natural que ha contado con la aprobación del gobierno y que consiste en construir 14 pozos de extracción, 20 nuevos km de gasoducto y sustituir 50 km ya existentes por nuevas canalizaciones. Está previsto extraer 7.000 gigavatios/hora de gas y se contempla una segunda fase en la que se pretende aprovechar las cavidades que quedasen libres tras las extracciones para el almacenamiento de gas.

No queremos que Doñana se convierta en un almacén de gas ni que se ponga en peligro la conservación del Parque Natural y Nacional, es un lugar privilegiado y muy importante ecológicamente hablando, del que deberíamos sentirnos orgullosos y tratar de proteger.

Por eso, desde este blog, quiero manifestar mi apoyo a la campaña "DOÑANA NO SE TOCA".

martes, 5 de febrero de 2013

el abuelo de sierra morena


Cuentan que existe un espíritu salvaje que a veces se aparece en esta parte del mundo, una criatura que con su sola presencia altera la tranquilidad de los pequeños y medianos mamíferos del matorral y revuelve el vuelo de los córvidos que encuentra a su paso como nadie. Su aspecto impone hasta al más valiente de los pobladores de este agreste lugar, y la tranquilidad y la decisión de su paso no inspiran nada de confianza hacia sus subordinados vecinos. No hay ni un solo alma salvaje que esté por encima de él en la pirámide trófica. No es un tigre ni un gato, pero todos los seres que comparten su área de campeo saben que el lince ibérico es el gran superdepredador del monte mediterráneo. El gato cerval es, como se suele decir vulgarmente y atreviéndome a llevar la expresión a una forma de ver las cosas más informal, el "puto amo" de la sierra. Es tal la superioridad de su rango trófico que puede incluso permitirse el lujo de campear tranquilo, sin más estrés que el que le pueda suponer la incertidumbre de no saber si el camino que lleva el declive de su especie le va a permitir al menos ser abuelo algún día.


La mixomatosis introducida por el hombre en los conejos de campo (especie que representa más del 90% de la dieta del lince); los atropellos en carreteras y caminos; el furtivismo con lazos, cepos, veneno e incluso a tiros; la fragmentación de sus actuales áreas de distribución y otros tantos motivos producidos por la acción del hombre han ido reduciendo la poblacion de estos fantasmas del matorral hasta convertir a este ya de por sí efímero ser en el felino más amenazado del mundo. Una frase tan repetida en los últimos años que a estas alturas más bien podría parecer un eslogan publicitario, pero lo cierto es que solo dos o tres cientos de ejemplares que quedan en libertad son los que mantienen su escasísima demografía en los dos últimos reductos oficiales que les queda en nuestra península, o mejor dicho, en todo el mundo. Una situación que pende de un fino hilo, pero que poco a poco va cobrando la salud que ya le va tocando, en buena parte gracias a la unión entre administraciones y propietarios de fincas privadas en las áreas donde este animal establece actualmente sus territorios de caza.

En este sentido podemos decir que el estrés que sienten los amantes incondicionales del lince también va bajando poco a poco, proporcionalmente a la lenta pero sin pausa subida de su aun escasa densidad de población. Pero ahora se le une un nuevo problema: el lince no puede dispersarse. Literalmente, los pocos gatos que quedan están encerrados en medio de sus escasos reductos, que no pueden ampliar por sí mismos por culpa del efecto barrera que le produce el hecho de tener que atravesar las infraestructuras construidas por el hombre que se encuentran a su paso, manteniendo sus poblaciones aisladas e incomunicadas e impidiendo así su intercambio genético. El rey del monte mediterráneo, derrocado por su antagonista humano. El rey del monte mediterráneo, hoy, sube poco a poco el número de sus efectivos gracias a su aliado humano. Curioso.

Pero no todo es malo. Hoy día los propietarios de las fincas y los cazadores de las zonas linceras son cada vez más conscientes de la importancia que tiene el lince para el correcto mantenimiento del equilibrio en las poblaciones interespecíficas. Como el más celoso de los guardianes, el lince no soporta la presencia de otros depredadores dentro de su territorio. Es por esto que siempre que pueda intentará mantener a raya las poblaciones de otras especies carnívoras terrestres como zorros, meloncillos o ginetas. Precisamente por esta razón ya no hace falta convencer a la mayoría de los interesados en las piezas de caza menor de que donde hay más linces, también hay más conejos. Es como si estas personas tuvieran una especie de guarda natural al que solo hay que pagar con un conejo al día, que es el que proporciona al lince las 750 calorías que necesita cada día para poder sobrevivir en su cada vez más hostil y reducido mundo.

Poco más de una hora antes de que el gran astro que mueve a todos los latidos del monte mediterráneo nos deje un día más para poder cerrar el ciclo y que todos los duendes del matorral puedan completar sus funciones, Cerrajero, llamado así por los científicos que trabajan con el lince ibérico en esta parte de la sierra, decide abandonar el lentisco donde ha permanecido oculto durante todo el día y se dirige lentamente hacia una presa cazada por él mismo y poco habitual en esta especie. Este gran lince, que a sus 14 años de edad puede presumir de ostentar el honor de ser el abuelo de Sierra Morena, hace sólo unas horas ocultó su preciado trofeo, un precioso muflón, cuya carne custodiaba desde un oteadero cercano con la intención de volver a la presa durante algunos días hasta terminar de engullirla. La costumbre de este animal de cazar ocasionalmente algún ungulado a pesar de sus diferencias de tamaño le ha valido en algunos lugares el apodo de gato cerval.

Cerrajero es ya un lince muy viejo, al que le falta el pincel de una de sus orejas, y aunque todavía tiene una cierta agilidad, ya se le van notando los años en sus ojos, ojos que nadie sabe qé y cuántas cosas habrá visto por estas sierras perdidas del sur de España. Quién sabe si debido a su edad, hace tiempo que no tiene territorio, y desde entonces vaga de un lado para otro buscándose la vida, cada día en un punto distinto de la sierra. En el año 2006, los científicos del Proyecto Life colocaron un collar radiotransmisor a este lince y le dieron el nombre por el que lo conocemos, y desde entonces ha sido sin saberlo un fiel colaborador de la ciencia para que hoy podamos saber un poco más sobre las costumbres y los movimientos de este escaso animal.

Si entre todos hacemos algo por evitar su extinción, grandes y viejos gatos como Cerrajero podrán seguir siendo los protagonistas de numerosos comentarios como este en pro de la supervivencia del lince ibérico. Si no se cumplen estas condiciones, los linces jóvenes nacidos este año tendrán muy difícil la tarea de llegar a ser abuelos algún día. Nuestra especie tiene mucha culpa de que este animal esté al borde mismo de la extinción, por eso somos nosotros mismos los que más podemos y debemos hacer por evitar su desaparición. Sólo nosotros, unidos entre administraciones, dueños de fincas, voluntarios y usuarios de este espacio natural que compartimos hombres y linces, estamos capacitados para evitar que el fantasma de Sierra Morena se convierta en una leyenda.